Lo sé, sé que no descubro nada nuevo, pero no deja de sorprenderme. Por desgracia, es una sorpresa que tiene mucho de decepción. Mi canal en Youtube, que abrí hace ya bastantes años y que he ido abandonando (apenas lo mantengo, excepto para subir algún que otro vídeo "suelto" por necesidad), tiene vídeos bastante exitosos. Algunos tienen más de medio millón de visualizaciones, y hay bastantes sobre las 100.000-50.000 visualizaciones. Para mí no es importante, si lo fuera hubiera seguido dedicándome a ese canal. Pero el caso es que ha dejado de interesarme: la mayoría del contenido de Youtube es morbo. No es culpa de los que publican allí, es culpa de lo que la gente les pide. Si nadie viese esos vídeos, pocos los subirían.
Hace unos meses decidí hacer el "experimento" con Cataluña, en donde pongo un vídeo obviamente bastante sensacionalista y ficción, pero aún así supera las 3.500 visualizaciones. Vídeos útiles de verdad (consejos de gafas, pruebas de linternas...), apenas tienen visitantes. De hecho dejé de subirlos, no solo porque no me guste el formato de vídeo, sino porque colgar un vídeo supone un trabajo bastante grande en forma de edición y preparación que, honestamente, prefiero dedicar ese tiempo a realizar sesiones de fotografía.
Este tema es para reflexionar, ciertamente. Qué es lo que la gente busca y qué es lo que la gente consume, y la mayoría de vídeos de éxito en Youtube son basura. El problema es que se da imagen de que es ese el único contenido que interesa, y al final es el contenido que se produce, por lo que es la pescadilla que se muerde la cola: basura, consumiendo más basura.
No digo que no haya temas interesantes, pero la mayoría de temas -políticos, sobre todo- no aportan nada. Es solamente perder el tiempo y tragarse ideologías de "politicuelos" del tres al cuarto.
| Redacción: esRevistas.com / esRevistas.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario